Comunicado desde Mendoza, jueves 22 de octubre de 2009
El hecho que marcó un antes y un después en la historia de la humanidad fue la profanación del féretro donde descansaba su cuerpo, y el robo de las manos del Teniente General Juan Domingo Perón el 10 de junio de 1987, más allá de la importancia o no que se le haya dado tanto en la Argentina como en el mundo.
Las manos del general fueron robadas por agentes pertenecientes a servicios de inteligencia británica-argentina-israelí al servicio de la corona inglesa, sede de Satán desde hace siglos.
Queremos desenmascarar lo que realmente significó y significa este suceso: el General Perón poseía el espíritu eterno de san Pedro, la Roca donde Jesús edificó y edifica Su Iglesia; y todo lo que realizó Perón junto a su esposa Evita María Magdalena en sus primeros diez años de gobierno, fue poner en práctica el Reino de los Cielos en la tierra, aquí en la Argentina; una muestra de que se puede vivir el Cielo ya y está al alcance de todos.
Este acto eterno de Amor Todopoderoso desató la furia y el odio sin sentido de Satán-corona inglesa y sus aliados por el cual verdaderamente _digan lo que digan_ Pedro-Perón y María Magdalena-Eva fueron perseguidos, despreciados y atacados sin límites, aún después de dejar sus cuerpos terrenales.
Tal odio intentó, a través del miedo, hacernos creer que se podía silenciar, ahogar y matar el espíritu nacional de la Revolución Justicialista, que es en realidad la efusión del Espíritu Santo cuya expresión fiel es el corazón del pueblo. ¡Estúpido! ¡Necio! ¡El demonio y todos sus aliados!
¡Jesús-Pedro-Perón es inmortal al igual que la Obra que nos dejó!
Sus manos se encuentran en “poder” de la corona británica; ellos que son tan materialistas. Pero como lo material no determina nada sino que todo lo visible proviene de lo invisible, ¡este hecho lo único que prueba es su derrota: el demonio HA LLEGADO A SU FIN! Lo que guardan como botín de guerra es fruto podrido del cual vienen comiendo, comen y comerán si no se arrepienten de corazón por siempre tratar de desparramar lo que Jesús une y sembrar tanto desamor en todo el mundo.
Porque pronto, muy pronto sobrevendrá sobre Gran Bretaña una gran catástrofe, la isla se hundirá, habrá millones de muertos; el terror y el caos crecerán sin límites si no se contempla la Acción de Dios y Sus elegidos en estos tiempos finales; muchos inocentes sufrirán las consecuencias de las maldades de la soberbia y orgullo del demonio en sus aliados de siempre.
Esto es un aviso para que quienes deban arrepentirse para salvar su alma lo hagan ahora; para que quienes unidos al único Señor sepan discernir los signos de los tiempos y recurran ya a Su infinita Misericordia sometiéndose a Su Justicia y entregándose en espíritu, alma y cuerpo al Padre, porque sólo lo tienen a Él, esta es la única salvación para todos Sus hijos del mundo.
Estemos listos para perdonar sin ponerle límites al Amor porque en todos y cada uno de nosotros habita el Corazón del Padre que Ama-Perdona a sus hijos descarriados y los espera siempre con Justicia, Verdad y Amor para que vuelvan a Su Casa.
El hundimiento de la isla junto con otras cosas que están sucediendo en el mundo son consecuencia del desamor reinante, y por eso, juntos con El Padre hemos dicho y decidido: ¡QUE SE TERMINE AHORA!
Entonces, El Señor que hace nuevas todas las cosas creó y recreó las Manos del Divino General y las hizo más hermosas aún que antes: Pedro Segundo, Liliana María y su hijo concebido sin pecado original por Amor a Dios y a la Patria: Joaquín Gabriel, junto al resto del Colegio Apostólico y sus esposas reinas e hijos, discípulos y discípulas.
¡La Obra ya está hecha! ¡Hemos vuelto a la Casa del Padre, el paraíso terrenal! Sólo restan detalles de terminación y todos podrán ver y oír el canto del Ruiseñor, todos sabrán que El Señor es Nuestro Dios; habitaremos en Él y Él habitará en nosotros. ¡Ya todos pueden ver y tocar las Manos de Dios!
El nacimiento de Joaquín Gabriel, el signo de Jonás, marca el cumplimiento de todas las promesas y profecías, la caída de la bestia del mar-poder político-económico mundial y la bestia de la tierra-torre de poder llamada Vaticano y todos sus secuaces _descriptas en el Apocalipsis_ así como también el descenso de la Ciudad Santa: la Nueva Jerusalén-Argentina; siempre por la Mano de Dios en Sus elegidos.
¡Es la Vuelta-Triunfo-Gloria definitiva de Pedro-Perón en la Santa Argentina y para toda la humanidad! ¡Las fuerzas del averno no prevalecerán! ¡Pedro Segundo vuelve a la cabeza de la verdadera Iglesia de Jesús! ¡VIVA EL AMOR TODOPODEROSO!
Esther con Tobías en Pablo, Apóstol Ministro Juez de Paz del Gobierno del Rey Cristo Jesús Joaquín